La historia de Calypso Y Erlina.
Hace algunos años, en un lugar que posiblemente no tiene nombre,
Existió una mujer, Llamada Calypso, su nombre era el de una hada, ya que ella, había llegado a este mundo solo por desobediencia a sus hermanas, ella tenia curiosidad por conocer este mundo, al que una vez por año ellas visitaban, sus hermanas solamente se presentaban cuando, Alguien inocente las invocaba; No cualquiera las veía, no poseían ese don, y el que lo poseía sabia que debía guardar ese secreto, ya que al tenerlo se consideraba alguien muy especial y de buenos sentimientos.
Calypso era una mujer muy hermosa, y atractiva, le encantaban los niños, llego a este mundo un dia distinto a los demás, al pueblo al que visitaban era un pueblo solitario, pero con un bosque al lado hermoso, con árboles frondosos, y tan enorme era el bosque, que si te descuidabas, te perdías, no eran muchas las personas que visitaban ese bosque, llamado El bosque de Gales.
En ese pueblo vivían unos niños, los cuales pertenecían a una familia muy humilde, tenían pocos recursos, pero muchos sueños.
Vivian en una casa antigua con muchos secretos, la casa era, muy antigua, ya que había pertenecido tiempo atrás ala misma familia, solo que pasaba de generación en generación, la casa donde ellos vivían era de los padres de su padre..
En esa casa se ocultaban tantos misterios, calipso la conocía en especial conocía una habitación, la de Erlina, una niña ala que ella visitaba. Era su amiga,
Aun que ella al principio se negaba a creer alo que veía después entendió que ella era un ser especial.
Erlina era una niña muy fantasiosa, pero solitaria, se encerraba durante Días y no salía de su dormitorio, era una niña con principios de autismo, su familia era algo pequeña, era la menor de cuatro hermanos, su madre murió durante su parto, Ella era una niña muy especial y muy bonita, cabello largo y negro, siempre ocultando sus ojos grandes y de color verde, su piel era blanca, muy blanca, pero algo pálida, tenia su boca pequeña y de color rosa, siempre vestía, con sus zapatos de charol negros y su vestido rosa con negro de holanes, el cual la hacia ver aun mas pálida de lo que Erlina era.
Cuando solía salir solo era a pasear al bosque de Gales, y lo hacia sin permiso de su padre.
era un bosque misterioso, la gente decía que ese bosque albergaba a seres extraños, sobre naturales, y cosas y que si explorabas mas aya de su corazón podrías descubrir cosas las cuales nunca podrías llegar a decir; ya que al entrar al bosque era difícil volver de nuevo a casa, pero la pequeña lo visitaba poco,
Conocía el camino como la palma de su mano, a pesar de sus repentinas visitas, aun sin embargo sin conocerlo del todo, siempre era guiada por Calypso, la oscuridad de la noche las cobijaba, el bosque misterioso de el que tanto la gente murmuraba, solían pasearlo de noche, cubiertas con una túnica negra, la luna iluminaba su camino, y calypso guiaba los pasos de la pequeña Erlina, el aire espolvoreaba la tierra y mientras la noche seguía su curso, la luna crecía entre las tinieblas. Cada vez se hacia mas grande, iluminando los pasos de ella…
La pequeña invocaba a Calipso con Jengibre, encendió una vela de color blanco, cerrando sus ojos y de su boca salían lentamente y en voz firme estas palabras:
Espíritu de la luz, espíritu de la sabiduría, cuyo soplo concede y toma la forma de todas las cosas. Tú para quien la vida de los seres es sombra mudable y niebla que se desvanece. Tu que levantas las nubes y vuelas sobre las alas de los vientos. Tu que aspiras y pueblas los espacios sin fin. Tu que aspiras y cada cosa creada por ti a ti retorna, motor eterno en la eterna quietud, se por siempre bendito. Nosotros te alabamos y te bendecimos en el reino cambiante de la luz creada, de las sombras, de los reflejos de las imágenes; aspiramos férvidamente a y tu mudable y eterno esplendor. Deja que penetre hasta nosotros el brillo de tu inteligencia y el calor de tu amor: entonces lo que es movible se detendrá, la sombra se convertirá e cuerpo, el espíritu del aire en un alma, el sueño en un pensamiento. Y no seremos ya arrastrados por la tempestad sino que sostendremos solidamente por la bridas los caballos alados de la mañana, y dirigiremos el curso de los vientos para volar delante de ti ¡OH espíritu de todos los Espíritus, eterna alma de las almas, soplo inmortal de vida, aliento creador , boca que aspiras y respiras la existencia de todos lo seres en el fluir y refluir de tu eterna palabra, que es el divino océano del movimiento y de la verdad. Amen. Y de pronto cuando Erlina Abría sus ojos veía un remolino de luces de color blanco y doradas y se abría de repente la ventana de Erlina y se escuchaba una flauta cuando el silencioso viento soplaba.
Estas palabras eran sacas de un viejo libro que su madre guardaba en un baúl.
Muchas veces la visitaron algunas de las hermanas de Calypso, pero ninguna era tan dulce y hermosa como lo era Calypso. Con sus cabellos rubios y sus ojos tan azules como el cielo y su hermosa voz
Ella era la mejor amiga de Erlina, ya que no contaba con muchos amigos, debido a que no salía mucho de su casa eso explicaba el porque ella siempre estaba sola, y lo mas raro de todo es que le gustaba estar sola, incluso en ocasiones que salía por las tardes, la veía la gente hablando sola, pero ella sabia que no estaba sola puesto que estaba con Calypso.
Calypso si se lo proponía podía caber en una bolsita pequeñísima y estar en la palma de su mano, era así como la acompañaba de dia y de noche, en sus sueños y en lo que hoy en dia llamamos ‘realidad’, mas bien a lo que los adultos llaman realidad, porque para un niño la realidad no existe, y este era el caso de Erlina no conocía limites en su grandioso mundo, lleno de fantasía.
La aventura de Ambas comenzaba cuando, la pequeña y Calypso se adentraban en el bosque, caminaban por entre las ramas y las hojas secas que se desprendían de los árboles, conforme caminaban pisaban pequeños arbustos, no era fácil caminar por entre tantas hojas y arbustos secos, algunos arbustos aun no desprendidos de los árboles, se topaban de frente y rasgaban la ropa de la pequeña Erlina.
Erlina estaba ansiosa por conocer la Aldea de calipso, por ver a más de ellas bailando el danzòn de la luz, El solo pensar que cubrirían su silueta dando vueltas alrededor de ella, el solo pasar por su mente ver tantas luces y darse cuenta que no era solo un sueño, que en verdad existen, y que ella tenía ese don para verlas.
La pequeña Erlina contaba sus aventuras como si fuesen, verdaderos cuentos, pero nadie en verdad tenia idea de donde ella las sacaba, creían que por estar todo el tiempo sola,
Formaba esas ideas en su cabeza.
Erlina contaba, que una de aquellas veces que visito la aldea de calypso, conoció a un duendecillo llamado Trébol, él cual le obsequio en una caja de madera con unos finos chocolates, le pidió que los comiera cuando su alma sintiera tristeza y soledad y le dijo la siguientes palabras, cuando me necesites siempre me as de encontrar, Solo frota dos gemas.
Cuando Erlina visitaba ese mundo tan místico e inquietante de el que muchos niños hablaban pero de el que nadie había conocido.
Y conforme el tiempo pasó Erlina creció y pero jamás dejo de creer en las hadas,
Pasaron los años y conoció a alguien mas llamado Demetrio, le platico de su mundo, y al parecer el la comprendía; paso el tiempo, Se casaron un dia nublado, en el jardín de la grandísima casa de Erlina; fue algo demasiado privado, Era un pacto entre el tiempo y ellos mismos, se juraron amor eterno, ellos se amaban, ellos en verdad se amaban.
Formo una familia, de la cual solo nació una niña, llamada Roseé,
Desde que nació Rosee tenia una chispa especial en la mirada, su cara siempre tenia una sonrisa, era una niña con los ojos verdes y llenos de vida, era algo parecida a su madre, solo que Rosee tenia un toque mágico algo en la mirada difícil de explicar era un toque en sus ojos, que cuando los veías te quedabas hipnotizado observando a esa bella damita, esas facciones que finamente sostenían aquella bella sonrisa.
Finalmente Erlina dedico parte de su vida ala escritura, aun en su edad adulta recordaba aquellas bellas alegrías, que ahora ella compartía con su hija y su marido Demetrio.
Mientras que el hada Calypso regreso a su mundo, en una de las aventuras que ella y Erlina tuvieron.
Esta Historia,
Tendrá Continuación...
